LA LUNA - Tarot Card

La Luna era considerada el ojo de la noche. Aquella que veía todo lo que sucedía en el momento en el que el humano se enfrentó a la oscuridad, a lo desconocido, a su sombra.
 
En ese momento comenzaba a cuestionarlo todo, su entorno, su existencia, sus sentimientos, incluso sus pensamientos. Era ahí cuando entraba en un terreno desconocido que lo obligaba a enfrentarse a su pasado oculto en el subconsciente.
 
En esta carta del tarot, La Luna, el humano está representado con el cangrejo, un animal saliendo a la superficie del subconsciente después de reconocer que el espejismo que lo separaba de conocerse a sí mismo era solo el reflejo que le generaba su entorno.
 
Al entrar allí se encuentra con sus dos caras: el perro, un animal domesticado lleno de creencias limitantes aceptadas o impuestas por la sociedad en la que vive; y el lobo estepario, aquel animal solitario que es en su esencia, donde encuentra todo su conocimiento, pero que si no logra entenderlo, le puede llegar a revelar su lado más peligroso y salvaje.
 
Las dos torres, representan todas aquellas memorias que han determinado su patrón de comportamiento a lo largo de su vida. Recuerdos que van desde sus más grandes alegrías hasta sus peores experiencias, sus miedos, sus demonios más temidos, que se esconden en los rincones y pasillos más oscuros precisamente para eso, para protegerlo del dolor.
 
Esta carta representa el dominio de la parte inconsciente, un camino en un oscuro desierto que solo podemos recorrer solos. Pero que estará vagamente iluminado por quien es considerada como la Diosa Madre, la única acompañante en momentos de confusión, miedo e inseguridad.